lunes, 9 de mayo de 2011

Nuestra segunda oportunidad en Angola

La familia Altamirano de Villa Gdor. Gálvez se encuentra en su segundo año de misión en Angola, África. Compartimos con todos ustedes las primeras vivencias en este 2011.
Estamos viviendo nuestra segunda estadía en este maravilloso continente de África, atrás quedo el increíble año 2010, con muchos buenos momentos vividos con la hermosa comunidad angolana.
Gracias a Dios por esta segunda oportunidad, todo lo vivido el año pasado nos sirvió para crecer como familia y a cada uno de manera personal. Este año nos acompañó por tres meses la mamá de Marcelo, ella feliz de poder conocer Angola. Volvimos nuevamente al mismo lugar de trabajo, la capital de Angola, Luanda. Fue más que brillante la bienvenida que nos dieron los angolanos en nuestra casa llena de niños y familias. Nos llenó de emoción; ellos nos esperaban y nosotros pensando que nadie iba a recordar que volvíamos. No se pueden imaginar cuánta alegría.
Mi cumpleaños (Marta), ¡qué lindo!, las mamas me regalaron un traje típico de Angola y fueron ellas las que me lo pusieron. Fue algo que me hizo sentir que vale la pena misionar en este país tan abandonado y tan sufrido; ellos te demuestran todo su afecto regalando cosas y con grandes banquetes; es algo que no podemos explicar con palabras lo vivido. Gracias a nuestro Padre del cielo que nos da salud y fuerzas.
Queridos míos, estamos felices y gozando de muy buena salud. Del paludismo ni hablar, es la misma María Santísima que nos cuida y nos cumbre con su manto sagrado. La abuela estaba muy contenta del regalo que le hizo Dios en estas tierras, ella enseñó pastelería a las mamas que trabajan en el jardín de infantes; preparaban pastaflora, tortas fritas, lemon pie y riquísimas cosas. Mas ellas felices de aprender, y no sabemos cómo le entendían porque ella habla todo en castellano; es la lengua del amor que el Espíritu Santo le dio para que darse a entender, esto es para que nos demos cuenta que el lenguaje del amor es el que nos comunica con el resto del mundo, solo la buena voluntad y el amor a prójimo nos basta, del resto se encarga nuestro buen Padre del cielo.
Les contamos un día nuestro, casi igual que el año pasado. Nos levantamos todos 6 horas de la mañana, Marcelo con las construcciones, ahora «canario» (Omar Flores, voluntario que está también con su familia; él es de San Nicolás) colabora con él. Juntos hacen un buen dúo. Marta este año tiene a su cargo un jardín como colaboradora (coordina y administra el jardín), al igual que el año pasado, es asesora pedagógica y coordinadora auxiliar de los tres jardines de infantes, también en la formación de los profesores ya que tienen un nivel muy bajo en los trabajos manuales; por la tarde da aulas de reciclaje y hace a la vez de psicóloga para niños del CIC (Centro Infantil Comunitario), chicos que vivían en la calle por problemas familiares y que ahora se recuperan de la droga (gasolina y mariguana). Es allí donde ellos entran en confianza y cuentan el por qué de llevar esa vida. Karina va la escuela, integra la banda musical tocando el saxo, es animadora de oratorio y auxiliar de catequista en la comunidad donde vivimos, Mabubas. Está muy contenta de poder ser más útil que el año pasado y feliz de poder servir en algo. Julián también va a la escuela y participa de los oratorios, practica capoeira, estudia piano y trompeta y, si Dios quiere, va integrar la banda también. Este año recibirá su primera comunión, es así que asiste a la catequesis en la misma comunidad. Al mediodía solo algunos volvemos a comer otros comen en casa de los voluntarios para no perder el tiempo en embotellamiento de autos en las calles. Llegando las 18 horas regresamos a casa por unos mimos de la abuela y juntos merendamos mientras comentamos el día vivido, luego la cena, la oración de la noche y siendo 22 horas nos vamos a dormir, esperando el nuevo día.
Familia, amigos, comunidad, esto es verdaderamente lo que Dios nos habló y lo que nos habla cada vez que despertamos en estas lejanas tierras; no es algo que se nos ocurrió para vacacionar, es misión, y de la buena; es la misión que Dios nos envió. No queremos aparentar ser valientes ni los mejores, sí queremos aparentar el amor al prójimo, que nos necesita, nunca nos olvidamos de nuestras raíces ni de donde somos, amamos nuestro país y rezamos mucho por nuestra gente. Somos familia misionera y esto sí que tenemos que agradecer a Dios, en estos tiempos donde la familia está siendo bombardeada por leyes inútiles donde la vida no tiene importancia (aborto), donde queremos decidir quién vive y quien tiene que morir, y donde el modelo de familia se desvanece (matrimonio homosexual). No dejemos de luchar por la familia y por la vida del niño por nacer que Dios tiene escrito en nuestra Sagrada Biblia, es de ahí donde tiene que salir las leyes que no son del hombre, son de Dios.
Bueno, creemos que es nuestro deber compartir estos momentos con Uds., que están con nosotros siempre unidos en oración. A no ponerse mal cuando no contestamos los mails o el Facebook, así mismo por celular. Angola está pasando un momento crítico, no tenemos señal de celulares e Internet gran parte de la semana, pero bueno, siempre hay un alma generosa que nos presta el modem y así podemos compartir con Uds. lo que estamos viviendo.
Nuestro deseo es estar el tiempo que Dios disponga, por ahora será un año más. Si el Padre del cielo lo dispone, volvemos para Argentina el 3 de enero de 2012.
Queridos amigos, todos rezamos por Uds., siempre que en esta cuaresma podamos renovarnos así poder un día estar juntos al padre celestial. Quedamos unidos en oración, que Dios los bendiga.
Familia Altamirano,
Marcelo, Marta, Karina, Julian, desde Angola.


Felices Pascuas de Resurrección
Hnos. queridos en Jesús. Ha llegado el gran día para todos los cristianos. Jesús, verdadero hombre, venció la muerte para darnos vida y en abundancia. Esta Semana Santa fue vivida con intensidad y mucho respecto por amor a Dios que nos ama; vivimos una víspera de Pascuas diferente, cayó una lluvia torrencial, mucha agua enviada por Dios, pero eso no fue causa para no asistir a la celebración. Fue maravilloso ver cómo las mamás llegaban mojadas con grandes sombrillas con sus bebés en la espalda; te asombra la fe que tiene esta bendita tierra.
Ojalá estas Pascuas podamos aprender un poquito de nuestros hermanos de Angola, a vivir la fe con todo nuestro corazón pero una fe verdadera; aquí aprendimos a vivir nuestra Pascua cada día, cuando vamos a nuestro lugar de misión, con los compañeros de la escuela, las profesoras de jardín, nuestro lugar de trabajo con los niños de la calle, las visitas a los enfermos y recién nacidos, cuando damos un besos o una caricia a un pequeño o un abuelo. Cada día es para nosotros nacer de nuevo, y es por eso que lo compartimos con Uds. porque son parte de nuestra misión.
Que el señor vencedor de la muerte nos haga vencer nuestros temores y podamos vivir unas pascuas verdaderas.
Felicidades a todos.

La corrupción y la inseguridad acechan

Más de una década intolerable. Nos acosan todos los días crímenes, delincuencia, robos, violaciones, asaltos de toda índole, entre ellos, en comercios como el nuestro, en el que sufrimos varios episodios tal como sucede en todo el país.
Me pregunto: ¿qué esperan las autoridades, como gobernantes o policías? Estos últimos con faltantes de todo tipo de elementos?, ¿de qué manera vamos a tratar de ir disminuyendo raudamente lo antes expuesto?
Y no debemos olvidar que esta situación está acompañada por la amplia corrupción que viven todos los asentamientos del país. Políticos, dirigentes gremiales, policía y la droga, constituyen los problemas de gravedad ya sin límite alguno.
Por favor, a toda la población nuestra, por el amor a nuestras familias, tenemos la obligación moral de atenuar en principio todas las circunstancias YA insostenibles. En consecuencia, el país y especialmente Villa Gdor. Gálvez, debemos bregar para volver a viejas etapas de tranquilidad general, sana, sin miedos, y por ende, por la naturaleza de una vida que merece ser vivida como Dios manda.
Colaboremos entre todos con la necesaria atención de este verdadero drama, tan infectado por verdadera delincuencia que debe, paulativamente, tener un final.
Mi propuesta, insisto, es que todos los pobladores, gobernantes, policía, etc., no nos acostumbremos a esta ingrata problemática.
Debemos realizar reuniones entre todos los sectores para concretar vientos nuevos.
Además, todos tenemos que cuidar el medio ambiente que se encuentra devastado, entre otras causas, por la tala de bosques; que las fábricas y transporte automotor se regularice, para acentuar los valores del hombre.
Por la vida y dignidad, todos lograremos reducir rápidamente este efecto tan maligno para la supervivencia de nosotros, nuestros hijos y nietos, etc. ¡Adelante todos!
Benito Nicola Martelli

UCR

El presidente del Comité Oficial de la Unión Cívica Radical de Villa Gdor. Gálvez, «Dr. Raúl Alfonsín», Sr. Raúl Martínez, hace saber por este medio su apoyo al Sr. Intendente municipal Arq. Jorge Murabito, ante el paro de un sector de los trabajadores municipales que se llevó a cabo días pasados.
Aclara que «cuando el paro es pacífico, en busca de reivindicaciones laborales o económicas, sin ocasionar daño o perjuicio a terceros, se los acompaña, pero si la sociedad corre riesgo en algo tan importante como la salud, todo se deja de lado, hasta la política, se da una mano y se trata de conciliar en pos del bien común». Por eso, salió a las calles no sólo como candidato a concejal, sino como ciudadano, y trabajó de igual a igual con el intendente, su gabinete, otros candidatos y con los trabajadores que apuestan a la ciudad.
«Es hora de dejar intereses personales para trabajar en serio por Villa Gdor. Gálvez».
Raúl Martínez (Presidente)
Daniel García (Secretario)